jueves, 28 de septiembre de 2017

Nada es gratis, todo lo pagamos con energía vital

Nada es gratis, todo lo pagamos con energía. Y lo que hay que pagar está en nosotros, es un intercambio de energía lo que hacemos a diario en nuestras vida cotidiana.

Todo se paga de alguna manera, pero no necesariamente con dinero.
Veamos, el amor se paga dedicando tiempo al ser amado; la paz interior se paga con tiempo para uno mismo, para meditar, para ayudar a otros; un bello jardín se paga con cuidado, abono, mantenimiento, etc.

Al tomar consciencia de esto, podemos aprender a gestionar nuestra energía vital.

Observemos cuándo desperdiciamos nuestra energía:
• Cuando estamos pasados de peso.
• Cuando nos enojamos.
• Cuando nos deprimimos.
• Cuando nos preocupamos por el futuro.
• Cuando nos arrepentimos del pasado (pues todo sucede para nuestra evolución).
• Cuando sentimos miedo.
• Cuando entramos en chusmeríos.
• Cuando nos preocupamos por el que dirán los demás.
• Cuando dormimos en exceso.
• Cuando guardamos rencor.
• Cuando odiamos.
• Cuando nos desbordamos y reaccionamos sin reflexionar.
• Cuando hablamos sin pensar.
• Etc.
La energía disponible en el universo es ilimitada, mas la capacidad para gestionarla puede ser limitada.
Cuando nos enojamos muy a menudo, podríamos estar teniendo energía en exceso, no gestionada adecuadamente. Cuando un globo se infla con demasiado aire la energía aumenta y la presión se vuelve insostenible en el recipiente y entonces explota.
Entonces, cuando tenemos emociones desbordadas, necesitamos aprender a transformar esa energía de la mejor manera.
¡Podemos aprender a transformar esa energía!

Cuando estamos alegres, empleamos la energía de la mejor manera.
La ALEGRÍA nos otorga poder, somos amos de nuestra energía cuando sentimos alegría y felicidad.
La manifestación física de un estado produce el estado asociado. La manifestación de la sonrisa produce el estado de felicidad y alegría. Podemos elegir una sonrisa aún sin sentirla; y mantener ese gesto hasta que el estado de alegría se presente.

¡A sonreír!

¿Cómo estoy gestionando hoy mi energía vital?

Si usamos nuestra energía para chismes, inmiscuirnos en asuntos ajenos, ponernos ansiosos por el equipo de fútbol o por el partido político, estamos desperdiciando nuestra energía.
Todo fanatismo o estar demasiado a la defensiva de nuestras opiniones,desperdicia energía y nos debilita.

Cuando mantenemos armonía interior, estamos cuidando nuestra energía.
Observemos algunas conductas que nos ayudan a mantenernos en armonía:

– Alimentándonos sanamente, con comida variada, comer de todo pero lo importante es que mantengamos un balance.
– Aprendiendo a relajarnos. Un método sencillo es respirar profundo y con consciencia varias veces, y contar desde el diez hasta el uno.
– Perdonando. Cuando guardamos rencor, odio, broncas contra alguien, estamos gastando energía valiosa que podemos usar para algo bueno para nosotros mismos.
– Riamos continuamente. Si no tenemos una razón, no importa.
William James dijo «El pájaro no canta porque sea feliz, es feliz porque canta».
Por ello, ¡riamos! pronto nuestros subconsciente nos obedecerá y nos dará razones para reírnos. Incluso reír ante lo difícil.
– Miremos lo que nos hace bien, leamos libros que nos nutran, investiguemos nosotros mismos para informarnos.
Veamos y escuchemos aquello que nos reconforte, nuestro Ser, esa sabio/a interior, sabe si se trata de algo que nos hace bien o no; en el cuerpo lo sentimos como liviano o denso.
– Dormir lo que nuestro cuerpo necesite, la mayoría no más de ocho horas al día. Al dormir bien nos sentiremos más fuertes, rejuvenecidos, creativos, alegres y felices.
– Mantengamos nuestra conexión con nuestro Ser durante el día. Practiquemos el silencio durante algún momento del día como encuentro con nosotros mismos.
– Hagamos ejercicio todos los días, por ejemplo una caminata por placer.
– Caminemos descalzos en la tierra, el césped, la arena del mar etc.
– Empleemos nuestra energía mental en crear, no en discutir ni tratar de convencer a otros.
– No cedamos a todos los deseos del ego; cada deseo consume energía. Cuando un deseo está presente te llenas de energía; cuando el deseo es satisfecho esa energía se esfuma.
-Usa una frase creada por ti mismo, por ejemplo:
“Mi capacidad para gestionar mi vida de manera autónoma y adulta aumenta día a día”

-Reconoce tus éxitos. Enumera al menos cinco éxitos que hayas tenido hoy.

No hay comentarios:

Publicar un comentario